El día jueves 07 de septiembre del corriente año se llevó a cabo el Acto de presentación de las obras donadas a la Escuela Normal Superior Martiniano Leguizamón, por parte del reconocido internacionalmente artista plástico Luis Alfonso Salas Dávila, colección de su esposa Prof. Elena Wouterlooud, en el marco del cierre de su carrera artística, tras sesenta años de trayectoria, las cuales pasarán a formar parte del patrimonio Institucional y de la comunidad de Villaguay en su conjunto.
El artista plástico, es oriundo de la ciudad de Tovar, capital del municipio homónimo, ubicada al sur oeste del estado Mérida en la República Bolivariana de Venezuela. Los Tovareños(as), como se le conoce a su gentilicio, son considerados como personas cordiales llenas de amabilidad y calidez humana típica de los Andes Venezolanos, tierra de hombres ilustres que han conquistado la gloria en varias áreas como el deporte, las artes, las humanidades, la ciencia y tecnología, la política, el espectáculo, entre otras. En el Barrio El Añil de la ciudad de Tovar, promediando la primera parte del siglo XX, nace Luis Alfonso SALAS DÁVILA.
Muy pequeño dejó los predios de su barrio El Añil para establecerse con su familia en Maracaibo. Culminó la educación primaria en el Colegio Pichincha y se inclinó por el arte de la música, culminando un curso de cuatro años en la Academia Musical del estado de Zulia. Se residenció en Mérida para cursar estudios de magisterio en la Escuela Normal Alberto Carnevali.
A través de la obtención de una beca del Ministerio de Educación Venezolano, realiza Estudios de Arte puro en la academia «Bellas Artes de San Fernando»; Circulo de Bellas Artes y Academia Atrium, Madrid, España.
Posteriormente, se radica en Florencia, Italia, donde también realiza Estudios en la «Accademia di San Marcos» bajo la dirección del gran Maestro Primo Conti.
Finalmente, egresa con el título de Licenciado en Artes por la Academia de «Bella Arte di Roma» con el Maestro Renato Cuttosso, Roma, Italia.
Los perfeccionamientos posteriores sobre arte en Paris, Londres y México, así como un largo peregrinaje por toda Centro América y otros países, indudablemente han constituido experiencias y dificultades que afrontó con la tenacidad de la Sierra Nevada de los Andes Venezolanos. A este respecto la influencia de sus maestros fue determinante en el proceso de búsqueda. El artista, sin embargo, hizo un recorrido a pulso, con fe de carbonero, hasta lograr un estilo propio; una sólida personalidad artística, inconfundible, y en el camino se convirtió en un maestro del color. Desde aquel Barrio El Añil de su Tovar natal, discurrió su vida desde y por el arte, transitando por Maracaibo, Mérida, Caracas, Madrid, Florencia, Roma, París, Londres, México, Centro América hasta Villaguay, corazón de la Selva del Montiel entrerriana, Argentina.
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